Corte térmico de metales
El corte por láser, el corte por plasma y el oxicorte son distintos procesos de mecanizado utilizados en las industrias metalúrgica y metalúrgica, que utilizan energía en diversas formas para cortar prácticamente cualquier forma a partir de materiales ferrosos y no ferrosos de chapas o grandes planchas. Durante los procesos, los materiales se calientan, se funden y provocan emisiones nocivas. Si no se controlan adecuadamente, el polvo y los humos suspendidos en el aire suponen un riesgo para la salud de los operarios y dañan la maquinaria.
Se ha asociado una amplia gama de riesgos para la salud con el polvo y los humos de los procesos de corte térmico. La naturaleza y gravedad del peligro variará según el tipo de material y el método de corte.
Para entender por qué es tan importante un alto nivel de eficacia de la filtración, es necesario revisar algunos de los riesgos para la salud asociados a las emisiones del corte térmico. Tanto si se trabaja con acero dulce, acero inoxidable, aluminio, galvanizado u otro material, la composición química es un buen punto de partida para identificar los riesgos para la salud. La mayoría de las autoridades locales de salud y seguridad han establecido límites de exposición permisibles (PEL) basados en la media ponderada en el tiempo (TWA) de 8 horas para cientos de polvos.
Los captadores de polvo consumen energía durante todo el tiempo que están en funcionamiento. La mayor parte de la carga eléctrica se destina al motor del ventilador que mueve el aire por el sistema. También se utiliza mucha energía para calentar o enfriar el aire fresco que sustituye al aire de proceso extraído.
La buena noticia es que hay formas de reducir estos costes, utilizando menos electricidad, menos aire comprimido y menos cartuchos.