Iniciar el proceso de Fertilización In Vitro (FIV) puede ser una experiencia emocionante y a la vez estresante para cualquier persona que necesite ayuda para concebir un hijo.
Solo en los países industrializados, se estima que el 15% de las personas tienen problemas para concebir. Los científicos lo achacan al estrés, la contaminación ambiental, la dieta, las enfermedades de transmisión sexual y la obesidad como las principales razones.
Proporcionar el ambiente adecuado para la fertilización es uno de los pasos más importantes en la FIV donde la calidad del aire en laboratorios y salas de procedimientos clínicos pueden tener enormes efectos sobre la calidad del embrión, su supervivencia y el resultado clínico del tratamiento. En ese momento es cuando la división de Camfil: Control de Contaminación Molecular ofrece varias soluciones a esta industria.
Muchas clínicas de FIV en los países desarrollados se han convertido en empresas rentables y la "tasa de éxito" en sus procedimientos son factores clave que las parejas tienen en cuenta a la hora de seleccionar una clínica.
La buena calidad del aire puede estar directamente relacionada con la tasa de éxito del procedimiento de FIV. Se han identificado varios gases o grupos de gases como problemáticos, incluidos los compuestos orgánicos volátiles (COV), aldehídos, formaldehídos, óxido de nitrógeno y estireno. Las moléculas que son tóxicas para las células humanas se conocen como citotóxicas y las citotoxinas pueden alterar la membrana celular externa o evitar que las células crezcan y se dividan.
El óvulo humano unicelular se divide de dos a cuatro y de cuatro a ocho células; y durante este período inicial (proceso de división celular) fuera del cuerpo femenino, es cuando la exposición a contaminantes moleculares en el aire supone un gran riesgo, por lo que se deben tomar precauciones en el procedimiento de FIV para limitar la exposición. Las soluciones de filtración de aire para contaminantes y partículas moleculares proporcionará esa protección esencial para el embrión antes de la implantación en el cuerpo femenino.
Para hacer frente a diversas fuentes de contaminantes gaseosos, los filtros moleculares se pueden colocar en diferentes zonas dentro del sistema de ventilación del edificio para filtrar el aire fresco y tratar las concentraciones de contaminantes de fuentes externas, y también para filtrar el aire recirculado de fuentes internas y externas. Para obtener el rendimiento óptimo de cualquier filtro molecular, es esencial utilizar prefiltros para proporcionar protección contra las partículas. El nivel mínimo recomendado es: ePM1 50% (ISO 16890) o MERV 13 (ASHRAE 52.2).
La filtración molecular se basa en el uso de un adsorbente de amplio espectro que eliminará el 99% de todas las diferentes moléculas en el aire.
Sin embargo, los adsorbentes de amplio espectro no controlan todos los gases relativamente comunes, lo que requiere el uso de un adsorbente especial impregnado químicamente para atacar moléculas individuales o grupos de moléculas. Una configuración en capas, sujeta a restricciones de espacio disponible y pérdida de carga, proporcionará un rendimiento superior y un ciclo de vida más bajo, en comparación con una solución de medias filtrantes combinadas.
Algunos expertos en clínicas de FIV son conscientes de los problemas relacionados con la "desgasificación" de contaminantes moleculares de los materiales utilizados para construir tales instalaciones, y no sólo los expertos, algunos clientes ahora también buscan las mismas garantías en el método de filtración; en términos de gasificación molecular, como otros elementos de la clínica.
Para estas clínicas, Camfil recomienda filtros GigaPleat que se ensamblan utilizando solo materiales que han sido probados para asegurar características de baja desgasificación. Los filtros CamCarb, CityCarb, y CitySorb tienen atributos únicos: Alta capacidad de eliminación combinada de partículas y moléculas.
Como especialistas, Camfil puede ofrecer una amplia gama de servicios de apoyo a las clínicas para lograr el máximo beneficio de la filtración molecular. Estos servicios incluyen dispositivos de monitorización pasiva para determinar las concentraciones de gas en sistemas de ventilación y espacios cerrados, como el dispositivo Gigacheck de Camfil para analizar las muestras de filtros moleculares usados, monitorizar la vida residual y planificar el reemplazo de filtros.
Camfil tiene un centro de ensayos de filtración molecular único para probar productos a gran escala e imitar las condiciones de aplicación reales. Nuestro software también se utiliza para determinar la vida útil de la filtración molecular y ayudar a los clientes a seleccionar la solución más adecuada y eficiente para su aplicación. Probamos nuestros filtros según el estándar ISO 10121-1:2014 método de prueba para evaluar el rendimiento de las medias y dispositivos de limpieza de aire en fase gaseosa para ventilación general.
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