aeropuerto de copenhague
El aeropuerto de Copenhague se fundó en 1925 y fue, por tanto, uno de los primeros aeropuertos comerciales del mundo. Los primeros años se caracterizaron por un espíritu pionero y, al mismo tiempo, el considerar que desplazarse en avión seguía estando reservado a los más privilegiados.
Desde sus inicios, tanto el sector de las aerolíneas comerciales como el Aeropuerto de Copenhague han experimentado un enorme desarrollo. Un desarrollo en el que la constancia del Aeropuerto de Copenhague va muy por delante es el recuento de viajes. En 2018, el aeropuerto batió un récord con 30,3 millones de pasajeros
CENTRADOS EN LA CONTAMINACIÓN DEL AIRE
Es un reto para todos los aeropuertos que grandes cantidades de aire exterior penetren en las terminales y otros edificios, aire que a menudo está lleno de partículas y gases peligrosos. La fuente de la contaminación son tanto los aviones como los vehículos utilizados para las operaciones de aviación. El aeropuerto de Copenhague trabaja a conciencia para proteger la salud de los viajeros y de muchos miles de personas.
Para ello, el aeropuerto ha instalado un sistema de ventilación con filtración de 2 etapas que consta de filtros de bolsa ePM1 60% (F7) para la filtración de partículas y filtros moleculares para la filtración molecular (filtración de carbono). Camfil AB mantiene una larga y sólida colaboración con el aeropuerto de Copenhague, donde la ventilación se efectúa con los filtros seleccionados de Camfil.
"La solución parece funcionar perfectamente y nos ahorra tiempo y dinero. Por eso hemos elegido la misma solución para las demás instalaciones"
El separador de gotas lleva instalado más de 3 años y ha demostrado claramente que impide la entrada de agua en el sistema, por lo que la placa inferior del mismo ya no se corroe y no es necesario cambiar los filtros debido a la humedad. El resultado positivo ha llevado al Aeropuerto de Copenhague a invertir en tres separadores de gotas CamVane adicionales para otras dos instalaciones problemáticas.